A medida que la infraestructura hardware IT cumple años, es normal que el CTO se tenga que plantear una renovación tecnológica de sus sistemas. EL OEM (fabricante original del equipo) te indicará que debes renovarlo cada 3 o 5 años, sin embargo, en muchas ocasiones la velocidad de crecimiento de nuestro negocio no es tan rápida, y no tenemos una necesidad real de seguir ese ritmo de renovación (ni de tener que realizar la inversión económica necesaria).

Muchos fabricantes descontinúan la producción de hardware como una forma de crear demanda para sus últimas ofertas de productos. Sin embargo, si tus equipos informáticos funcionan de forma correcta, el fabricante no debería influir en tu política de actualización de los equipos, sino que más bien debería obedecer a cuestiones de requerimientos operacionales de tu negocio o como forma de obtener ventajas competitivas. Para esta decisión también tendremos en cuenta la optimización respecto a los costes de infraestructura hardware.

¿Cuándo renovar los equipos informáticos de mi empresa?

Entonces, ¿en qué momento nos resulta rentable invertir en equipos nuevos o mantener los que actualmente nos están prestando servicio?

Comprender el significado de las fases del ciclo de vida de un equipo es vital para tomar una decisión mejor y más rentable para tu negocio. Desde nuestra experiencia como soporte técnico it para empresas, hablaremos de 2 de las fases más importantes en el ciclo de vida de un elemento hardware: Fin de vida y Fin de vida útil.

End of Life (EOL)

EOL es un término empleado por el fabricante para describir un producto que pronto será reemplazado por una nueva generación de tecnología. Además, el fabricante ya no lo venderá ni lo comercializará. Durante la fase EOL, el fabricante aún puede ofrecer opciones de mantenimiento, sin embargo, el firmware del equipo se ha estabilizado y prácticamente no hay actualizaciones.

End of Service Life (EOSL)

La fase final del ciclo de vida de un producto se llama EOSL. Con este término, el fabricante ya no solo no vende el hardware, sino que tampoco ofrece servicios de soporte de mantenimiento, y si los ofrece tienen un coste muy alto. En estos casos, un TPM (proveedor tercero de servicios) ahorra dinero a tu empresa y proporciona los mismos beneficios, como soporte rápido, asesoramiento experto y, además, la capacidad de extender la vida útil de un equipo de IT.

¿Cuándo renuevo la tecnología de mi empresa?

Cuando un producto entra en la fase EOL, el firmware de ese producto se vuelve muy estable y es muy probable que el fabricante ya no lance nuevas actualizaciones. Es importante tener en cuenta que los parches de seguridad generalmente están disponibles para el público independientemente de quién preste los servicios de soporte. Confiar los servicios de mantenimiento a un TPM se traduce, por un lado, en una posibilidad de extender la vida útil de tus equipos más allá del EOSL, y por otro lado en un importante ahorro de costes en la infraestructura hardware al no tener que incurrir en sobrecostes por los servicios del OEM.

 Por tanto, la elección de un proveedor externo para tus servicios de mantenimiento ahorra dinero a tu empresa y proporciona los siguientes beneficios:

  • Acuerdos de nivel de servicio (SLA) equivalentes
  • Soporte remoto experto e ingenieros de campo altamente cualificados.
  • Flexibilidad en los contratos (altas y bajas de equipos revisables, opción normalmente no disponible en un soporte OEM)
  • Renovación tecnológica a nuestro ritmo.

Si quieres saber más detalles de cómo podemos ayudarte a optimizar la gestión de tu infraestructura IT y el ciclo de vida de los activos haz clic en https://www.itwise.es/soporte-mantenimiento/

Martín Rivas

Gerente de Cuentas de ITWISE TECHNOLOGY SERVICES